jueves, 7 de abril de 2011

Crea momentos (blog)

María Corcuera es madre de dos preescolares. Está muy interesada en la educación basada en las metodologías de pensamiento creativo y ha elaborado este blog, cargado de originalidad y excelentes ideas; además nos presenta propuestas de actividades que los padres pueden realizar con sus hijos. Sin duda puede ser interesante para cualquier docente concienciado de la extraordinaria importancia que tiene el desarrollo de la creatividad del alumnado.

5 comentarios:

María Corcuera dijo...

Manuel, te agradezco de corazón tus bonitas palabras. Creo realmente que un mundo creativo nos hará más felices a todos. Saludos. María.

Anónimo dijo...

holla amigos,Me Disfruta su blog,buen espacio, Te falta sólo un botón de traducción el resto tudo ok!
abrazo
excusa mi horrible espanol!

Manuel Dorado dijo...

Gracias por tus amables palabras. El blog ya dispone de un traductor (Google Translate) que está situado en la barra lateral derecha.

Saludos.

Isabel Aguera Espejo-Saavedra dijo...

Querido Manolo: Con tu permiso añado una pregunta más: ¿Os parece un avance pedagógico,psicológico, metodológico que a un niño de seis años le manden para un día 16 páginas de estudio para un examen? Y es más, advirtióndole que ponrán textos en los que falten parabras a fin de que estudien de memoria.
Creo qu eno hemos avanzado nada en métodos. ¿La culpa? No lo sé, pero pienso que menos papeleo y más y mejor reciclaje. Todos somos creativos, pero hace falta que llegguemos a entender que la creatividad no se hace; se vive. Y no solo en las aulas sino en nuestro estilo personal de vida.
Eres un maestro como la copa de un pino, querido amigo Manolo

Manuel Dorado dijo...

Muchas gracias, Isabel. Creo que estamos en total sintonía. La educación no debería haber perdido la esencia, que es tan simple como la relación entre varias personas que intercambian información, apreciaciones, opiniones, ideas, que se plantean preguntas y buscan respuestas... Algo tan sencillo como natural. Y todo ello debe darse en un ambiente relajado, en el que la confianza impere, donde el objetivo principal no sea evaluar a los alumnos para, en el fondo, calmar nuestra propia inseguridad hacia nuestro trabajo. Cada vez más al profesorado se le exige tareas que no tienen nada que ver con su verdadera función; y estos, a su vez, se dejan llevar por las directrices de editoriales, objetivos, exigencias de la administración, presiones de algunas familias (que no entienden qué es lo verdaderamente importante cuando hablamos de educar),... Todo ello impide que el proceso de enseñanza-aprendizaje se desarrolle de forma gratificante para el maestro y sus alumnos.

Gracias por tus palabras. Un abrazo.